No es demasiado necesario especificar cuales son las reivindicaciones de los controladores aéreos. No mucho porque a grandes rasgos sabemos que es obvio que no tienen razón. Pero ahí va la lista de su último comunicado:
Contabilizar como horas extraor-dinarias hasta un tercio de su jornada de trabajo habitual, a fin de alcanzar unos salarios de más de 300.000 euros anuales. Por cierto sus jornadas de trabajo efectivo que rara vez superan las 10 horas semanales.
Organizar su propio régimen de trabajo y su propio régimen salarial, a través de su sindicato, determinando cuándo, cómo y cuánto se trabaja, y cuánto se cobra, independientemente de las necesidades del servicio. Buscan, por ejemplo, acumular jornadas de trabajo y guardias para asegurarse vacaciones de dos semanas por cada tres días de trabajo efectivo.
Garantizar el control por parte de su sindicato del acceso a la profesión y la formación de los nuevos profesionales, a fin de solo sean sus familiares y amigos quienes se incorporen a la casta de privilegiados. Por cierto, sin necesidad de pasar por la universidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario